Como les platicaba ayer, la política en Puerto Vallarta es como un buen culebrón, ¡lleno de traiciones y cambios de bando que ni en las telenovelas!
LLEGÓ SU MERO MERO
Después del duelo épico entre el PRI y el PAN, y la breve aparición de Movimiento Ciudadano como el nice del barrio, llegó Morena, ¡el terremoto que sacudió el avispero! Y al frente, ni más ni menos que Andrés Manuel López Obrador, el mero mero.
ESA ES LA VERDAD
AMLO, ni tardo ni perezoso, reclutó a lo mejorcito (y lo peorcito) del PRI y del PAN. ¡Compró conciencias a granel! Les dio embajadas y consulados a los que le juraron amor eterno, o a los que simplemente se dejaron querer en sus estados. ¡Negociazo!
LA PUÑALADA TRAPERA
Y así llegamos a Vallarta, donde Carlos Lomelí Bolaños, ahora senador VIP, le jugó chueco al doctor Francisco Sánchez Peña. Le prometió el oro y el moro, que él sería el candidato de Morena, ¡y zas!, en Guadalajara le metió la puñalada trapera y nombró a Luis Alberto Michel Rodríguez, ¡un panista de hueso colorado!
LO TRAÍAN MAREADO
Con el «profe de 10» en la bolsa, lo trajo como trompo. Ganó la elección facilísimo, gracias al «efecto AMLO», no porque fuera el mesías que Vallarta esperaba. ¡Fue tal su victoria que se creyó Batman! Lo veían como futuro gobernador, ¡más arriba que el mismísimo Lomelí! Pero, ¡ay, qué golpe se dio Michel! Al querer imponer a su esposa, Chuyita López, la mandaron al tercer lugar. ¡Así le demostraron que no estaban contentos con su «imposición»!
HIZO SU APARICIÓN
Y luego, después de brincar del PAN al PRI y coquetear con el MC, ¡tadáaa!, aparece en escena Luis Ernesto Munguía González, ahora con la camiseta del Partido más verde que un aguacate. Aunque antes intentó colarse a la «cuarta transformación» con Morena, ¡nomás tantito!
Pero, ¿qué importan los partidos cuando el poder llama? Al menos, eso pensamos los que sudamos la gota gorda todos los días.
TENDRÁ CONTINUACIÓN
Pero bueno, amigos, parece que tendremos que seguir con esta historia mañana, ¡ya se me acabó el espacio! Así que, sin más rollo, ¡continuará!
Espero que este artículo te guste. ¡Si necesitas algo más, no dudes en preguntar!
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